La vitalidad de Antonio Gamoneda es increíble. Después de su paso por el Mediterráneo, de su paso por la Residencia de Estudiantes, viajó a León para encontrarse de nuevo con Juan Gelman, Premio Cervantes 2007. Allí mantuvieron un "duelo poético", ambos afirmaron que su poesía está marcada por el sufrimiento y el dolor. Dos vidas cercanas y en cierta medida, paralelas. ¡Ah, ayer en Sevilla! Para que luego digan que la poesía no interesa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
A pesar de su edad, hay que ver que vitalidad que tiene.
La poesía es el motor de su vida, sin duda.
Publicar un comentario